Hace unos días Chiqui de la Fuente nos hablaba de Netdisaster - ¡Destruya el web!. Una página que te propone “varias maneras de torturar tu casa virtual y ver los resultados (alguno de ellos son realmente demoledores) para que luego no te lleves demasiado sofocón por si te ocurre realmente”… Nada más leer el post me metí y sometí, como hizo el propio Chiqui, mi blog a todas las cabronadas que te plantea la aplicación. Una blogocatarsis y una buena forma de echarte unas risas a costa de ti mismo. No está mal.
Pero no es el único sistema de “tortura”. Buceando por Microsiervos (alertado por un compañero de trabajo) me encontré con otra aplicación nada desdeñable para dar un buen susto a alguien o para imaginar titulares imposibles. Resulta que pegando en el explorador, una vez hayas entrado en cualquier web (El País, por ejemplo), una ruta java puedes editar todo texto que tengas delante, cómo suena. El titular, el cuerpo o lo que te venga en gana. El delirio está asegurado.
Pero no es el único sistema de “tortura”. Buceando por Microsiervos (alertado por un compañero de trabajo) me encontré con otra aplicación nada desdeñable para dar un buen susto a alguien o para imaginar titulares imposibles. Resulta que pegando en el explorador, una vez hayas entrado en cualquier web (El País, por ejemplo), una ruta java puedes editar todo texto que tengas delante, cómo suena. El titular, el cuerpo o lo que te venga en gana. El delirio está asegurado.
*Java para editar una web: javascript:document.body.contentEditable='true'; document.designMode='on'; void 0
Comentarios