Le llaman Truñi. Se aburre mucho y pide a gritos ideas para pasar el rato… Nadie le soluciona la papeleta y no sabe qué hacer con su vida. No le gusta leer, ni ver la tele, no tiene amigos, los videojuegos no le llaman la atención, dejó el pegamento y se enganchó al regaliz, quiso ser mimo pero le pegaron en el parque y pasó de seguir con la pantomima, se hizo tuno pero un jarrón que le cayó tras subir demasiado una octava con su mandolina le llevó a pensárselo mejor…
Ante el silencio ha decidido entretenerse de aquella manera. ¿Cómo? Pincha aquí y lo sabrás pronto.
Comentarios