Nacho es un experto en enlazar sueños de otros a través de su blog. De repente estás hablando con tu amigo o enemigo de turno en mitad de tu mente dormida y te despiertas vagando en una web completemente ajena a todo. Reconozco que a veces me ha jodido grandes momentos, pero también me ha regalado situaciones irrepetibles. Una vez, salté de una pesadilla en la que Chanquete se travestía en mitad del lado oscuro de la fuerza y confesaba ser mi padre, a un blog especializado en orillas de mar sin bordes en el horizonte. Pero hay más personajes...
A mi amiga Nat
alia por ejemplo, en una ocasión Nacho le dejó en manos de unos expertos en 'lo suyo' cuando estaba a punto de 'hacérselo' con Johnny Weissmüller en modo Tarzán. Su vida, la de Natalia, cambió radicalmente al despertar. Supo sin ambigüedades que necesitaba estudiar/examinar más en profundidad el terreno propio, con o sin expertos, más allá de junglas personales.
Rofolfo, el primo de alguien que nada tiene de tonto, acabó incrustado entre viejas entradas que nadie había leído. Todas interesantes, todas abandonadas por el ritmo de la actualidad. Apenas un par de comentarios le recordaba a Rodolfo que había opciones de conversación en el mundo. En el sueño desde el que partía se disponía a ahogarse en un barreño lleno de azucar y chistes malos.
¿Y cómo un tipo como Nacho se especializa en linkar a unos con otros entre post e ideas incoscientes? ¿Cómo lo hace? No hay experto ni en redes ni en informática o psicología que explique 'lo suyo'. Y él, reconoce, no sabe cómo ni por qué lo hace. Sencillamente... lo hace. A veces ha querido perderse entre sueños, propios o ajenos, pero no lo logra. Está limitado a mover la cruceta de los demás. Y lo peor es que no duerme (o no sabe que duerme) y aunque intenta enlazar ideas, no consigue cuajar.
A mi amiga Nat

Rofolfo, el primo de alguien que nada tiene de tonto, acabó incrustado entre viejas entradas que nadie había leído. Todas interesantes, todas abandonadas por el ritmo de la actualidad. Apenas un par de comentarios le recordaba a Rodolfo que había opciones de conversación en el mundo. En el sueño desde el que partía se disponía a ahogarse en un barreño lleno de azucar y chistes malos.
¿Y cómo un tipo como Nacho se especializa en linkar a unos con otros entre post e ideas incoscientes? ¿Cómo lo hace? No hay experto ni en redes ni en informática o psicología que explique 'lo suyo'. Y él, reconoce, no sabe cómo ni por qué lo hace. Sencillamente... lo hace. A veces ha querido perderse entre sueños, propios o ajenos, pero no lo logra. Está limitado a mover la cruceta de los demás. Y lo peor es que no duerme (o no sabe que duerme) y aunque intenta enlazar ideas, no consigue cuajar.
Comentarios
Me ha gustado mucho.
Fdo: un ex perto en paro.