
Y ahora... no es que haya reaparecido, sigue sin dejar ver su avatar, pero por una serie de tejemanejes he logrado llegar a él a través de un familiar no real que tiene acceso a su perfil. Así que vía IP he conocido la historia de su coma. Resulta que un par de horas antes de desvanecerse había comido en un restaurante, llamado Ensueño, que ofrecía como plato estrella ese día Potaje de vigilia. Se lo pidió sin dudar, lo disfrutó pero la alergia desconocida a ciertos caldos de cultivo le llevaron hasta la UCI.
Ahora, afortunadamente, tras probar un suero especial que mitiga los efectos nocivos, ha sido trasladado a la UVI, pero no a la de siempre, sino a la Unidad de Vigilia Interactiva. Desde ahí, y por un canal restringido, estoy comunicándome con él. Es una red un poco asocial, pero por lo menos puedo informar. Me comenta, por cierto, que dentro de muy poco estará con nosotros de avatar presente.
Salud!
Comentarios
Del sonido del teclado pasas al sonido de un interogante en tu mente (virtual o analógica, en este caso da igual). Y ese interrogante te columpia una y otra vez,en una idea: la locura.
Porque inevitablemente, y secundando tu reflexión, estas asusencias te llevan a plantearte tu propia existencia.
Y como bien dices, ese es otro terreno, bastante movedizo por cierto, tal vez otra historia...o la misma pero mirada desde el otro lado del prisma.
INEFABLE, Seseña.
M.
A veces uno se comunica por canales extraños con seres que no sabes si existen, aunque les tengas bastante cariño, o tal vez he probado demasiados "sueros especiales", mi madre dice que me caí en uno cuando nací.
Aunque como bien dice Juana "uno se comunica por canales extraños con seres que no sabes si existen" a mi me gusta pensar que "tecleamos, luego existimos", aunque sólo sea en la ficción. isa
"Nadie quiere ser parte de una ficción, y menos si esa ficción es real" (Paul Auster)
Esta fición es real, y lo queramos o no, formamos parte.
Fdo: admiradora de este blog y de sus comentaristas