La siguiente historia está basada en un hecho muy real y reciente:
Sergio Reso tiene 16 años y es católico. Acaba de cambiar de barrio (en Madrid). El viernes pasado visitó su nueva parroquia para conocer al padre Tapia. Sergio es celíaco y quería consultar al sacerdote si entre sus hostias había una partida especial sin gluten (proteína contraindicada para los celíacos)...
El ministro pastoral, mitad sorprendido, mitad indignado, sacó pecho, se le iluminó rostro, se acentuaron las tonalidades coloradas en nariz y pómulos y se dispuso a responder. Parecía un tenor a punto de entonar... Hijo mío, el cuerpo de Cristo no tiene gluten. Y se quedó tan ancho. Y Sergio que no debe de ser muy creyente, o al menos, no confía 100% en el poder del cuerpo de Cristo como filtro contra el gluten, decidió probar suerte con otras hostias en otra parroquia. Ahí le pierdo la pista.
Ya por curiosidad me entero de que el debate sobre las obleas "de siempre" y la comunión de los celíacos católicos viene de lejos. Por ejemplo, en la Asociación de Celíacos de Madrid leo que tenían "(...) para aquellas personas que las solicitaban obleas de maíz, no siendo éstas materia válida según la Iglesia...".
Entonces llega el físico Stephen W. Hawking, escribe que no hace falta Dios para explicar el Universo ... y se produce una tormenta mediática. ¿Por qué? ¿No se consideraba este tema una prueba superada? (El País, 5 de septiembre 2010).
¡Amén!
El ministro pastoral, mitad sorprendido, mitad indignado, sacó pecho, se le iluminó rostro, se acentuaron las tonalidades coloradas en nariz y pómulos y se dispuso a responder. Parecía un tenor a punto de entonar... Hijo mío, el cuerpo de Cristo no tiene gluten. Y se quedó tan ancho. Y Sergio que no debe de ser muy creyente, o al menos, no confía 100% en el poder del cuerpo de Cristo como filtro contra el gluten, decidió probar suerte con otras hostias en otra parroquia. Ahí le pierdo la pista.
Ya por curiosidad me entero de que el debate sobre las obleas "de siempre" y la comunión de los celíacos católicos viene de lejos. Por ejemplo, en la Asociación de Celíacos de Madrid leo que tenían "(...) para aquellas personas que las solicitaban obleas de maíz, no siendo éstas materia válida según la Iglesia...".
Entonces llega el físico Stephen W. Hawking, escribe que no hace falta Dios para explicar el Universo ... y se produce una tormenta mediática. ¿Por qué? ¿No se consideraba este tema una prueba superada? (El País, 5 de septiembre 2010).
¡Amén!
Comentarios
Yo tampoco entiendo el revuelo. Si Rouco Varela hubiera dicho que últimamente no lo ve claro…. pero que lo diga un científico astrofísico parece natural, no?.
En fin, parece que en algunas parroquias las hostias ya no son lo que eran, o eso al menos nos canta Krahe:
“Ahora las envuelven en papel de celofán. Hormonas, colorantes, que sé yo lo que tendrán”
Con esta frase ayer me reí un rato .... ¿cambiamos a dios por Jobs? .... casi suenan igual jajajaja
Hawking puede decir lo que le venga en gana, digo yo ....
Como dice LOWON, la especie humana es una broma de los aminoácidos.
Copifate
Hawking, puede opinar lo que desee, faltaria mas !!!
En Fin !!!
Mas cultura falta ainssssss