Anteriormente: Capítulo 1 /Cap.2
Duldián Desconocido es muy reservado, pero llegó a un pacto con Marcial Razondeser y Pardo Reverso. Algunos de los detalles los conoce Domingo Forzado, un periodista que -de tapadillo- me informa de todo lo que pasa en la extraña comunidad que "custodia" Joaquinete Simpatía; y gracias al cuál estáis conociendo esta historia -casi- a tiempo real. Aún tiene que atar algunos cabos, pero sé que dentro de poco os podré contar desenlace de este extraño caso...
Duldián tiene mucho que decir, pero no suelta prenda. Marcial y Pardo son uno, en cierto sentido, pero dos en la distinta dirección. No coinciden; a uno le gusta salir dentro y al otro dejar sus pepinillos de Bruselas sobre la mesilla de noche, antes de acostarse cada mañana. Ese día, se reunieron los tres en casa de Joaquinete y sellaron un pacto. Ellos, como uno, susurraron al berberecho introspectivo con virtudes intelectuales. Duldián nunca había hecho terapia y ellos le removieron tanto, que abrieron su interior en canal. Los demás moluscos volvieron a cantar como ruiseñores.
Desde la final (Italia - Alemania) del Mundial de Naranjito Marcial y Pardo no se veían las caras. ¿Por qué? En breve tendré todos los detalles. Pero sí os puedo decir que los tres comparten una historia que está a punto de salir a la luz. Domingo ha hablado esta mañana con Joaquinete. Con el pretexto de visitar la granja y a sus berberechos cantores se ha colado en su piso y le ha tirado muchas preguntas. No es la primera vez, de hecho, cuando Joaquinete recurrió a la terapia del susurro no se acordó de que Domingo ya estaba en su piso en ese momento...
Continúa mañana...
Duldián Desconocido es muy reservado, pero llegó a un pacto con Marcial Razondeser y Pardo Reverso. Algunos de los detalles los conoce Domingo Forzado, un periodista que -de tapadillo- me informa de todo lo que pasa en la extraña comunidad que "custodia" Joaquinete Simpatía; y gracias al cuál estáis conociendo esta historia -casi- a tiempo real. Aún tiene que atar algunos cabos, pero sé que dentro de poco os podré contar desenlace de este extraño caso...
Duldián tiene mucho que decir, pero no suelta prenda. Marcial y Pardo son uno, en cierto sentido, pero dos en la distinta dirección. No coinciden; a uno le gusta salir dentro y al otro dejar sus pepinillos de Bruselas sobre la mesilla de noche, antes de acostarse cada mañana. Ese día, se reunieron los tres en casa de Joaquinete y sellaron un pacto. Ellos, como uno, susurraron al berberecho introspectivo con virtudes intelectuales. Duldián nunca había hecho terapia y ellos le removieron tanto, que abrieron su interior en canal. Los demás moluscos volvieron a cantar como ruiseñores.
Desde la final (Italia - Alemania) del Mundial de Naranjito Marcial y Pardo no se veían las caras. ¿Por qué? En breve tendré todos los detalles. Pero sí os puedo decir que los tres comparten una historia que está a punto de salir a la luz. Domingo ha hablado esta mañana con Joaquinete. Con el pretexto de visitar la granja y a sus berberechos cantores se ha colado en su piso y le ha tirado muchas preguntas. No es la primera vez, de hecho, cuando Joaquinete recurrió a la terapia del susurro no se acordó de que Domingo ya estaba en su piso en ese momento...
Continúa mañana...
Comentarios
Nos vas a enganchar como a los culebrones!
isabel