Año 2038. Una serie de despropósitos globales ha provocado que los misiles (los mejorcitos de cada casa) se hayan disparado autónomamente. No siguen unas coordenadas establecidas. Por el contrario, vuelan a su antojo sin destino pero con un sólo objetivo: explotar. Cuando por fin impactan, arrasan con todo. No queda un alma viva en todo el planeta; en todo el Globo, excepto en un local…
Es la casa de Gran Hermano. El Mundo ha reventado; todas sus miserias, neuras, histerias, estupideces y por supuesto toda su riqueza se han ido a la mierda. Una lástima. Sin embargo existe una posibilidad de regeneración terrestre y humana: los concursantes del programa de Tele5 son la esperanza. Quedan tres; un chico medio robot y dos chicas cleptómanas, una de ellas con exceso de metamorfosis ambigua en la sangre. Hay un problema, han perdido todo contacto con el exterior y el silencio que sale por los altavoces de la casa no les preocupa. Piensan que es parte de la prueba a superar. Y además, carecen de toda inquietud.
Se celebraba la treinta y no sé cuánta edición del reality… Pasan días, semanas, meses… un año sin que los concursantes sepan nada del exterior. Ni sienten ni padecen. Casualmente la última prueba que les impusieron antes de los bombazos consistía en resistir... A ver cuánto tiempo aguantaban con lo mínimo. Eso incluía ausencia de apoyo por parte de la organización. No hablan, protestan, se cabrean, se ponen a parir, se dan cabezazos contra las paredes, se deshacen en ‘el acto’… pero a ninguno le choca que nadie fe fuera diga nada, que no haya nominados, que no haya ganado nadie todavía.
Me voy a la hemeroteca de 2041 y leo lo siguiente: Hallados tres cadáveres humanos. Lo publica el diario KTG45, emitido por un grupo de amebas híbridas con matices viriles. El artículo habla de idiosincrasia farmacológica y humana. No usan papel, sino memoria interactiva e intercambiable. Afortunadamente Martínez nos trae las crónicas del futuro, que fue lo que perdió él para siempre. Dice que las esporas y los puntos suspensivos del siglo XXII tendrán mucho de concursantes del siglo XXI.
Es la casa de Gran Hermano. El Mundo ha reventado; todas sus miserias, neuras, histerias, estupideces y por supuesto toda su riqueza se han ido a la mierda. Una lástima. Sin embargo existe una posibilidad de regeneración terrestre y humana: los concursantes del programa de Tele5 son la esperanza. Quedan tres; un chico medio robot y dos chicas cleptómanas, una de ellas con exceso de metamorfosis ambigua en la sangre. Hay un problema, han perdido todo contacto con el exterior y el silencio que sale por los altavoces de la casa no les preocupa. Piensan que es parte de la prueba a superar. Y además, carecen de toda inquietud.
Se celebraba la treinta y no sé cuánta edición del reality… Pasan días, semanas, meses… un año sin que los concursantes sepan nada del exterior. Ni sienten ni padecen. Casualmente la última prueba que les impusieron antes de los bombazos consistía en resistir... A ver cuánto tiempo aguantaban con lo mínimo. Eso incluía ausencia de apoyo por parte de la organización. No hablan, protestan, se cabrean, se ponen a parir, se dan cabezazos contra las paredes, se deshacen en ‘el acto’… pero a ninguno le choca que nadie fe fuera diga nada, que no haya nominados, que no haya ganado nadie todavía.
Me voy a la hemeroteca de 2041 y leo lo siguiente: Hallados tres cadáveres humanos. Lo publica el diario KTG45, emitido por un grupo de amebas híbridas con matices viriles. El artículo habla de idiosincrasia farmacológica y humana. No usan papel, sino memoria interactiva e intercambiable. Afortunadamente Martínez nos trae las crónicas del futuro, que fue lo que perdió él para siempre. Dice que las esporas y los puntos suspensivos del siglo XXII tendrán mucho de concursantes del siglo XXI.
Comentarios
Muy bueno!!
tapón
El mono nunca bajaría del arbol,lo que yo digo siempre,evolución o involución.
Capi
PD..estamos perdidos!!!!!!
Reconozco que no he seguido mucho a Martínez por lo que me pregunto: ¿es él quien va a la hemeroteca de 2041 o un clon mejorado genéticamente de Mercedes Milá? ¿el diario KTG45 pertenece a AmeGoogle?
Este tipo de historias están pidiendo un corto, ya que te dedicas a la imagen... anímate!!! y cuenta conmigo en lo que te pueda ayudar, un abrazo.