Me preguntó si lo quería solo o con leche y le di con el paraguas en la cabeza. Conseguí abrirle la brecha que quería y después me marché por donde me había ido siempre: Por el final del cuento que nunca acaba de momento. No se cansa de contarme este resumen de su película los terceros martes de cada mes. Lo hace en el parque del Sonado, cerca de la plaza del Letargo... a dos metros del cruce de Ciego con Pelón. ¡Bueno, qué pasa, son las coordenadas que son!
Siempre se trae una botella de licor de avellana ecléctica marca El hijoputa del iconoclasta de la peña de al lado que nunca supo na para acompañar sus historias; que siempre son inconclusas y difíciles de agarrar, pero yo escucho con atención. Gutiérrez Teclado me agarra del brazo, me habla a susurros. Es profundamente histriónico y algo estrábico. No sé cómo termina ese cuento que no termina de momento, pero siempre tiene un paraguazo y un café mitad ofensivo mitad defensivo. Es entrañable.
Lo que sí sé es el porqué de su deseo de dibujar el Mar Rojo con una brecha en la cabeza de Cuadra Petrón, el sujeto pasivo con el que arranca este post de hoy. Dice que es su forma desequilibrada de viajar a ese gran pantano al que no puede ir por estar indispuesto de por vida en este sentido. Un sentido que sólo conoce su médico de cabecera (expresión que también da para uno o más textos), Juan Jarjar Lop's. Por cierto, el paraguas le acompaña en cada estación del año.
Salud!
------Siempre se trae una botella de licor de avellana ecléctica marca El hijoputa del iconoclasta de la peña de al lado que nunca supo na para acompañar sus historias; que siempre son inconclusas y difíciles de agarrar, pero yo escucho con atención. Gutiérrez Teclado me agarra del brazo, me habla a susurros. Es profundamente histriónico y algo estrábico. No sé cómo termina ese cuento que no termina de momento, pero siempre tiene un paraguazo y un café mitad ofensivo mitad defensivo. Es entrañable.
Lo que sí sé es el porqué de su deseo de dibujar el Mar Rojo con una brecha en la cabeza de Cuadra Petrón, el sujeto pasivo con el que arranca este post de hoy. Dice que es su forma desequilibrada de viajar a ese gran pantano al que no puede ir por estar indispuesto de por vida en este sentido. Un sentido que sólo conoce su médico de cabecera (expresión que también da para uno o más textos), Juan Jarjar Lop's. Por cierto, el paraguas le acompaña en cada estación del año.
Salud!
*La imagen viene de Bogotá Mojada
Comentarios
Hacía que no oía yo lo de médico de cabecera..!!!
El principio es Daniel Seseña más Seseña que nunca (Si, yo también lo vi de pequeño).
Genial.
Un animador de animadores 3D