Hace algún tiempo, cuando llovían chuzos de punta y sapos desganados, a Rodrigo Scopio se le ocurrió una idea: Dejar de joder al personal con sus chistes. Tuvieron que pasar dos años para que se diera cuenta de que risas abiertamente falsas y silencios no eran precisamente un buen síntoma de salud para sus gracietas.
Se compró un libro de autoayuda, titulado Sabes qué te pasa, descubre el camino, de un tal Peter Help Freeman. No entendía nada y sólo se le ocurrían chistes. Tuvo una recaída rápida y le contó uno al pescadero, Román Resbalado. Prefiero no reproducirlo por vergüenza ajena a los hechos y por falta de memoria chistosa. Román no sólo no sonrió, sino que además le tiró un lenguado con cara de pocos amigos a la cabeza. Ese día Rodrigo tocó fondo.
Hoy, años después, me cuenta el relato y el desenlace en la tasca Mariana Boreal. Ahora se dedica al bocarte y ensayo de piscifactorías deprimidas. Aquel golpe de lenguado le abrió los ojos y el camino hacia las lagunas que tenía en la cabeza. Ahora, con su humor (originalmente mal canalizado) ayuda a mejorar la vida triste de boquerones y pececillos inadaptados al medio.
Salud!
Se compró un libro de autoayuda, titulado Sabes qué te pasa, descubre el camino, de un tal Peter Help Freeman. No entendía nada y sólo se le ocurrían chistes. Tuvo una recaída rápida y le contó uno al pescadero, Román Resbalado. Prefiero no reproducirlo por vergüenza ajena a los hechos y por falta de memoria chistosa. Román no sólo no sonrió, sino que además le tiró un lenguado con cara de pocos amigos a la cabeza. Ese día Rodrigo tocó fondo.
Hoy, años después, me cuenta el relato y el desenlace en la tasca Mariana Boreal. Ahora se dedica al bocarte y ensayo de piscifactorías deprimidas. Aquel golpe de lenguado le abrió los ojos y el camino hacia las lagunas que tenía en la cabeza. Ahora, con su humor (originalmente mal canalizado) ayuda a mejorar la vida triste de boquerones y pececillos inadaptados al medio.
Salud!
Comentarios
Tocar fondo es mejor que tocar techo... Aunque tratándose del medio marino, se invierte esta reflexión.
Besos
P.D:y me apunto la reflexión de la Zapateta
@vimartiz ".... una vez tocado el fondo con los dos pies puedes dar un buen impulso.... " me he acordado leyendo tu relato.
SCOPIO
Dícese de un bandido de los que asaltaban para robar el dinero, a punta de pistola y con el característico pañuelo, tapandose la cara.
Eso para mi hija, era un escopio.
Otra palabra era el DESASTRERO, que seguramente era el trastero desastrao, o sea, patas arriba...jeje
Firmado: Un lenguaraz